La filosofía de Trías, explicábamos en la “Vuelta” anterior, ofrece una respuesta a la crisis de la razón moderna -esa que se va manifestando en toda su crudeza a medida que avanza el siglo xx – distinta a cualquiera de las tres propuestas filosóficas que han dominado nuestro fin de milenio: la postmoderna (Vattimo, Lyotard, Derrida), la neo moderna (Habermas, Apel) y la antimoderna, esa que se presenta bajo el epígrafe de antirelativista (Ratzinger). La ontología del límite-decíamos el mes pasado- viene a ser un camino que transita por en medio de todas estas respuestas a la modernidad confrontadas entre sí, oponiéndose radicalmente a todas ellas. Pero al mismo tiempo, comparte con cada una de ellas algo fundamental.